Stray Kids: una tormenta emocional en el Estadio GNP

0 0
Read Time:2 Minute, 9 Second

La noche cayó sobre el Estadio GNP Seguros de Ciudad de México, pero no trajo calma. Trajo una marea de luces, gritos y emoción incontenible. En el firmamento, una luna llena flotaba como testigo silente de lo que sería una velada histórica: Stray Kids se presentaba por primera vez en México, y lo hizo ante más de 65 mil almas que no parpadearon ni un segundo.

A las 19:30, cuando las luces se apagaron y el escenario se encendió, ocho siluetas emergieron entre ráfagas de neón y humo: Bang Chan, Lee Know, Changbin, Hyunjin, Han, Felix, Seungmin e I.N. El rugido del público fue inmediato. No hubo introducción lenta, no hubo espacio para respirar. Solo una descarga de energía que sacudió hasta el concreto.

Desde la primera nota, quedó claro que no se trataba de un simple concierto. Era un encuentro largamente esperado entre artistas y fans, una comunión emocional sin fronteras lingüísticas. Las voces coreaban versos en coreano como si los hubieran escrito en su propia piel. No importaba el idioma: lo que hablaba era el corazón.

Las STAY, el devoto fandom de la agrupación, no solo asistieron: se entregaron. Habían ensayado coreografías, memorizado letras, aprendido saludos y hasta perfeccionado su sincronía con los lightsticks, que tejían una coreografía visual tan precisa como mágica.

La gira dominATE ya había dejado su huella en Chile, Brasil y Perú, pero el paso por México se convirtió en un hito. Los boletos de la primera fecha se evaporaron en cuestión de minutos. Más de 100 mil personas saturaron la fila virtual. ¿El resultado? Una segunda función que también colgó el letrero de “sold out” sin demora.

El público no era pasivo: era protagonista. Cada tema detonaba una reacción colectiva. Con Thunderous, el estadio vibró. Con District 9 y Venom, se desató la locura. Con Maniac y Case 143, llegaron las lágrimas. Y en los solos –el melancólico Hold My Hand de Han, el íntimo Youth de Lee Know, el encantador So Good de Hyunjin–, se sintió un silencio reverente que luego estallaba en aplausos ensordecedores.

Pero hubo una frase breve, sencilla, dicha en español, que rompió el techo emocional del estadio:
“Amamos los tacos. Esperamos mucho para llegar aquí. Entonces… ¿nos divertimos hoy?”
La respuesta fue un alarido, una ovación que parecía extenderse hasta la luna que aún colgaba del cielo. Stray Kids no solo ofreció un concierto. Ofreció una experiencia, una descarga de emociones que se quedará flotando en el aire de la Ciudad de México por mucho tiempo. Y las STAY mexicanas no solo asistieron: hicieron historia junto a ellos.

Happy
Happy
0 %
Sad
Sad
0 %
Excited
Excited
0 %
Sleepy
Sleepy
0 %
Angry
Angry
0 %
Surprise
Surprise
0 %

Average Rating

5 Star
0%
4 Star
0%
3 Star
0%
2 Star
0%
1 Star
0%

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *