Slipknot, un grandioso 25 aniversario en Guadalajara
Una de las bandas más importantes del Nu Metal en la historia, y una de las favoritas de la escena del metal en la ciudad, Slipknot, llegó con toda la maquinaria y poder para festejar su 25 aniversario de su álbum homónimo, lo que les valió una gira mundial y una presentación en Guadalajara y Ciudad de México, respectivamente.
El punto de encuentro fue Calle 2, en Zapopan, Jalisco, la noche del 8 de noviembre. Desde kilómetros antes, se podía ver a la gente yendo a este punto de reunión, en donde los integrantes de Slipknot nos deleitarían con un concierto grabado para la posterioridad en donde solo interpretaron las canciones de ese primer disco.
La banda que dio los honores de abrir el concierto fue la de Kerry King. El (ex)integrante de Slayer hizo vibrar a los tapatíos con canciones que no creo que se les pueda decir que fueron covers, pero que al final del día siguen siendo de su anterior banda. Con este preámbulo, se empezaba a cocinar esta noche memorable.
Las luces se apagaron, el mundo entro en éxtasis y, de repente, se escucha Dream Weaver. Algo tan anticlimático a lo que es Slipknot, para posteriormente acabando, dar paso a un sonido tétrico, y es cuando se empiezan a escuchar las voces de «742617000027«, iniciando su concierto con «(sic)«, haciendo estallar a todo el recinto y a los miles de fans que se habían conglomerado en el sitio.
Como si se tratara de escuchar el álbum pero en vivo, siguieron las canciones de «Eyeless» y «Wait and Bleed«, dos de las canciones que hicieron despegar a Slipknot a finales de los 90’s. Con un paseo por todo el albúm, la banda también interpretó «Get This«, «Eeyore«, «Me Inside«, «Liberate«, «Purity«, «Prosthetics«, «No Life» y «Only One«.
Para dar cierre a su concierto y dando casi hora y veinte minutos de concierto, Slipknot se despidió de suelo tapatío interpretando «Spit It Out«, «Surfacing» y «Scissors«, cerrando con una alta nota la noche que los fans mas puros de esta banda recordarán para siempre, de haber sido cómplices y testigos de un concierto memorable que tal vez no se vuelva a repetir jamás. Ahora crucemos los dedos para que repitan lo mismo con su álbum Iowa.